Este relato está escrito para el blog del Tintero de Oro que este mes nos contagia su entusiasmo por las hadas gracias a la muestra del libro el Pentamerón.
Un ser extraordinario
Ese día, el bosque se despertó revolucionado, un aura de miedo y temor lo recorría. Desde el más pequeño insecto hasta el animal más grande que allí habitaba lo intuía. Y en su interior, donde ningún ojo ajeno al mismo podía llegar, una luz surgía de la tierra, una luz negra que dejaba una estela de destrucción en aquello que tocaba. El mismo demonio de la noche intentaba salir a la luz para destruir a los mortales y hacerse con el control de toda la tierra.
Como si de un chorro de podredumbre se tratara, el líquido elemento que emanaba de las entrañas de la tierra convertía en muerte todo lo que alcanzaba, pronto todo su alrededor se tiñó de negro, mientras la fauna del lugar huía. A pocos kilómetros de allí, las hadas habían advertido el desastre que se avecinaba. Primero lo notaron en el aire, después lo sintieron y por último, lo vieron en la lejanía, el cielo parecía teñirse de esa aura negra que presagiaba muerte.
—¡Tenemos que buscar al Mago Azor, solo él será capaz de vencerlo!—. Exclamó, aterrada, una de las hadas.
—Me temo que esta fuerza es más poderosa, algo hay en el exterior que lo llama y multiplica su poder. Algo que se nos ha debido escapar, que se ha mantenido oculto—. El Hada Suprema sabía de lo que hablaba.
Un murmullo generalizado se extendió entre todas las hadas, cuando, de súbito, una voz apareció entre ellas.
—No te equivocas, Hada Suprema, el demonio ha cogido fuerzas y ahora es más poderoso.
—¡Mago Azor! No te hemos visto llegar.
—Ya sabes que no suelo anunciarme…
—¿Y qué se nos ha pasado por alto? ¿Qué origina tanto poder en un ser tan maligno?
—Dos cosas, mi querida hada: las brujas y los humanos.
—¡¿Las brujas y los humanos?! A las imprevisibles brujas hemos intentado vencerlas en todo lo que podíamos; y de los segundos, Mago Azor, ¿cómo es eso posible?
—Ha habido brujas escondidas, no en el bosque, sino entre los humanos, a los cuales tampoco se han dado a conocer; pero, en sus escondites, alimentaban a su espíritu y al del ser que ahora amenaza nuestra existencia… Y los humanos, Hada Suprema, solo unos pocos se libran, mas su envidia, egoísmo y avaricia ha llenado de poder al mismísimo Diablo. Ellos, con su mala actitud entre sus iguales y para con este planeta, ha colmado de odio el corazón de ese ser y hoy, gracias a ese alimento, tiene las fuerzas suficientes para vencernos.
Las hadas, apesadumbradas, cabizbajas, se temían lo peor. Ellas habían cuidado de los humanos desde que el mundo existía, sin embargo, quizá, habían confiado demasiado en ellos o, quizá, su ayuda había hecho crecer sus propios caprichos, su avaricia… Ese razonamiento, que todas tenían en su cabeza, acababa de caer sobre ellas como una losa. El Mago lo notaba, si bien, la verdad, aunque doliera, era preciso contarla cuanto antes.
—Debemos marcharnos de aquí.
—¿Marcharnos? ¿No lucharemos, mago Azor?
—La batalla está perdida, Hada Suprema, nos supera en poder, hay que admitirlo…
—Pero…
—Haremos lo que él ha hecho, nos esconderemos y multiplicaremos nuestro poder hasta que estemos preparados para la batalla.
—¿Y los animales? ¿Y el resto del bosque?
—Es inevitable, sucumbirán a su influjo, habrá quien no comulgue con su causa, quien lo odiará, y esa rebelión nos vendrá bien. Aquí se quedarán los dragones, aliados nuestros, camuflados, fingiendo que lo apoyan para no ser destruidos. Cuando volvamos, con su ayuda, ganaremos.
Las hadas aplaudieron, tímidamente; el Mago, con semblante serio, recapacitaba. Tras una pausa, continuó hablando.
—Avisad a las ninfas, elfos, ondinas, duendes…, partiremos a otra dimensión. Tras nosotros, la puerta se cerrará…
—¿Para siempre?
—Hasta que esta tierra nos reclame de nuevo...
—¡Hada Suprema, Hada Suprema!
—¿Qué ocurre, Hada Colibrí?
—Había ido a rescatar los nidos de los pájaros que pudiera, cuando he visto que la luz negra se había detenido. Alguien o algo está luchando contra ella.
—¿Cómo? ¿Quién? No es posible, no he sentido nada, no he visto nada.
El Mago Azor no salía de su asombro, no había nadie que pudiera enfrentarse al Diablo.
—¡Vayamos allí! ¡Deprisa! ¡Necesitará nuestra ayuda! ¡Vamos! —Gritó el Hada Suprema.
Todas, junto al Mago, volaron al lugar en el que la oscuridad y la podredumbre se había adueñado de la vida. Una cruel batalla se gestaba entre dos mundos, el de las tinieblas y el de la claridad. Dos haces de luz danzaban entre la tierra y el cielo imponiéndose a su manera. De dónde provenía uno estaba claro, pero detrás de quién estaba el blanco lo ignoraban. Las hadas miraban al Mago esperando una explicación y este, con los ojos cerrados, intentaba en vano identificar a esa criatura portentosa.
Los rayos de uno y otro rompían la tierra y el cielo con su estruendo, el miedo, ajeno habitualmente a ellas, comenzaba a brotar en las hadas y la impotencia, superior a él, en el mago. Una criatura mágica, poderosa, luchaba contra el Diablo, un ser excepcional al que nadie conocía ni siquiera el Señor de las Tinieblas.
La tierra temblaba, el viento silbaba y una fina lluvia comenzó a caer, convirtiendo en barro las cenizas que el chorro negro había provocado. De pronto, la oscuridad se impuso, el Diablo vencía y el mundo se rendía a sus tinieblas. Tras unos minutos interminables, el viento paró igual que la lluvia y en la intensidad de los haces de luz una voz resonó en todo el bosque.
—Mago Azor, hadas, ¡ayudadme! Hacedme llegar vuestra magia y juntos venceremos.
Sin saber dónde estaba el ser que había pronunciado esas palabras, todos dirigieron su magia hacia el haz blanco que, multiplicándose, acabó con la oscuridad enterrando en el subsuelo al siniestro que había perturbado su paz. Del bosque comenzaron a llegar más criaturas mágicas que unieron su magia, pronto la luz dejó de ser blanca para convertirse en amarilla, naranja, roja, azul, verde…, y venciendo, definitivamente, al señor de los infiernos. Cuando la grieta y el agujero por el que había salido se cerró por completo, dejaron su magia y la tierra volvió a tener el mismo aspecto de siempre. El mundo volvió a la vida y, aunque de uno había partido la lucha, la unión de todos había vencido.
Todas las criaturas fantásticas, aún incrédulas por lo que había ocurrido, intentaron averiguar quién era el ser que había plantado tan grande y valiente batalla, pero no se dejó ver y todavía hoy se preguntan si fue real o fruto de su propia magia
Solo el Mago Azor sabe que sí era real, pues encontró una pluma en el lugar en el que ambos rayos luchaban. Y, desde entonces, no ha parado de buscarlo.
Si la unión es fuerza, el conocimiento es luz.
Un lindo remontarnos a pasados de ensueño, cosas que hubiese sido lindo vivir pero...
ResponderEliminarMerche, una gran participación la tuya en el reto. Lo haces además de una forma que genera esperanza, mucho que aprender aquí.
Felicidades, 2
Muchas gracias Maty. Un abrazo. :)
EliminarHola Merche, un relato que está lleno de acción y misterio. Muy bien puestos los personajes y la historia resulta interesante. Me parece que podrías darle continuidad. Saludos.
ResponderEliminarHola Ana, eso creo yo, que da para más la cosa, por eso se me fue de palabras, me vine arriba y luego la dejé ahí que podía seguir. Gracias por tu comentario. Un abrazo. 😊
EliminarLa Gran Batalla entre los seres de la Luz, del mal, entre la bondad y la maldad y el caos es elevada a la enésima potencia en este relato en donde -y como debe ser- la Luz triunfa y el orden se restablece. Muchas gracias, Mercedes. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Myriam, gracias por tus palabras. Un abrazo. :)
EliminarMe encanto tu relato!!!. Saludos y feliz inicio de semana.
ResponderEliminarMuchas gracias. Un abrazo. :)
EliminarHola Merche. Me ha llamado la atención tu tenebroso cuento, especialmente la luz negra, he intentado imaginármela, una sombra que se extiende y, como cuentas, amenaza muerte.
ResponderEliminarConseguido el símil de la eterna lucha entre el bien y el mal, la luz y la oscuridad.
El conocimiento es luz, desde luego, y añado revelación.
Un saludo, compañera.
Muchas gracias por tus palabras, Tara. Un abrazo. :)
EliminarUn cuento precioso, Merche, lleno de magia y de misterio y un tono épico que lo carga de tensión. Me ha encantado. Felicidades.
ResponderEliminarMuchas gracias Marta. Un abrazo. :)
EliminarMuy interesante historia.
ResponderEliminarApareció algo que aterraba a las hadas, tan poderosas e inmortales. Que pensaron en huir, dejando a seres, como elfos y ondinas abandonados en un mundo hostil.
Pero no todo fue negativo.
Cuando todo parecía perdido, alguien insistió en enfrentar a la oscuridad. Y tuvo la ayuda del hada y de los magos.
Que buena historia. Un abrazo.
Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo. :)
EliminarQue gran mundo imaginario escribiste. Acción , misterio e intriga. Seguramente puedas hacer en su día una Segunda parte. Un saludo de ANTIGÜEDADES DEL MUNDO
ResponderEliminarSí, da para una segunda parte. Gracias. Un abrazo. :)
EliminarComo ya han dicho que otro comentario un relato donde nos dejas frases para reflexionar. Como que los hombres son culpables por su lucha entre iguales y la destrucción del planeta... Y comomal final, la unión de todos es lo que lleva a un buen final. Bonito relato.
ResponderEliminarUn saludo
Muchas gracias, Jose. Un abrazo. :)
EliminarSiempre queda en toda oscuridad un halo de esperanza, una luz que ilumina, aunque sea tenuemente, todo el camino. Así lo has reflejado tú en esta historia.
ResponderEliminarUn beso enorme, Merche.
Siempre debe quedar la esperanza, gracias Qamar. Un abrazo. :)
EliminarQue belleza Merche, todo un cuento de hadas. Me gustó muchísimo. Y su moraleja final también. Te aplaudo. Un abrazo y suerte
ResponderEliminarMuchas gracias Nuria, no lo puse a concurso, se va de palabras y días, jeje. Un abrazo. :)
EliminarMe gustan los cuentos de hadas y aquí hay uno fantástico, más allá que en muchas cosas parece muy real, con otra apariencia o con otro lenguaje que se presenta, gracias por traerlo, por darnos este regalo, gracias, abrazo
ResponderEliminarGracias a ti, siempre. Un abrazo. :)
Eliminar¡Hola, Merche! Si me permites, añadiría otra moraleja. Cuando la oscuridad te rodee no malgastes el tiempo en lamentos y quejas, basta simplemente con encender una vela. Un relato estupendo que, visualmente, me llevó a dos películas. En la primera parte, cómo no, a La Historia interminable, en el desenlace, soy muy de las anteriores películas de Marvel, a End Game cuando todos los superhéroes se reúnen en el último momento para derrotar a Thanos. Un relato con mucha miga de fondo, con temas como la desesperanza, la resignación, la entrega y, finalmente, la rebeldía ante la injusticia. Por no hablar de cómo, en realidad, el Infierno o la magia blanca son las personificaciones de ese Mr. Hyde y dr. Jeckyll que somos todos los seres humanos. Un abrazo!
ResponderEliminarGracias por tu comentario David y por tu otra moraleja, válida totalmente. Un abrazo. :)
EliminarHola, Mercedes. A ver si el conocimiento por fin se impone en nuestra sociedad y podemos crear un mundo mejor para las futuras generaciones.
ResponderEliminarUn relato muy bien escrito. Enhorabuena.
Hola Bruno, a ver si es verdad, sí. Gracias. Un abrazo. :)
EliminarHola Mercedes una historia esperanzadora y con una enseñanza muy buena. Un saludo.
ResponderEliminarHola Ainhoa, muchas gracias por tu comentario. Un abrazo. :)
Eliminar¡Hola Merche! Un gran cuento de hadas que nos deja con la duda de quién será ese ser sobrenatural de luz que les ayudó a ganar al mismísimo diablo. La moraleja también está muy bien elegida, concordando sus enseñanzas con la trama que nos has descrito. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario, Rocío. Un abrazo. :)
EliminarHola Merche. La eterna lucha entre la luz y la oscuridad, el bien y el mal, tan presente a lo largo de los siglos. En tu cuento todos los seres se unen para acabar con ese ser tenebroso que los pone en peligro. Nos queda la duda de quien será el ser luminoso, tal vez la paloma de la paz que ha dejado esa pista en forma de pluma. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario, Jorge. Un abrazo. :)
EliminarHermosa historia épica, donde el bien y el mal se enfrentan, seres mágicos y demonio, las historias que me gusta leer, felicidades me gusto mucho.
ResponderEliminarSaludos.
PATRICIA F.
Hola Patricia, muchas gracias por tus palabras. Un abrazo. :)
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