Cabeza.- Pero..., ¿otra vez estás así?
Corazón.- Fue bonito mientras duró...
Cabeza.- Ya, pero mírate, no tienes sitio para más cicatrices.
Corazón.- Pero he vivido y luchado por cada una de ellas. Todas me han aportado algo, aunque ahora no quede nada más que eso.
Cabeza.- ¿Y te merece la pena? Mi lógica me dice que no hay que sufrir.
Corazón.- Lo di todo, no salió bien, sin embargo, disfruté y fui feliz aunque ahora sufra.
Cabeza.- Pues yo creo que abandono, no es necesario más.
Alma.- Ambos tenéis razón, pero el amor es así, a veces no llega el adecuado. La vida, como el amor, también es así: unas veces buena y otras no tan buena, pero aprendemos y esa enseñanza nos invita a continuar, ¿sabéis por qué? Porque un día llegará el adecuado y entonces hasta las cicatrices desaparecerán ya que el amor verdadero todo lo puede. Anda, Cabeza, lee a Corazón ese poema de Lope que tanto nos gusta.
Y así fue como Corazón, Cabeza y Alma volvieron a ponerse de acuerdo de nuevo para continuar viviendo...
Cuanta razón llevan tus palabras, el amor solo hay que vivirlo y procurar no entenderlo , si no ya viene los problemas jaja. Un beso, feliz fin de semana.
ResponderEliminarMuchas gracias, Campi.
EliminarUn abrazo. :)
Excelente artículo. Tenía tiempo que no leía algo que a la vez me gustara y me dejara tantas lecciones. Y para ser recíproco, te voy a dejar un cuento...más bien crónica, de mi último libro que, por cierto, si te interesa te lo puedo enviar por acá también
ResponderEliminarhttps://tigrero-literario.blogspot.com/2020/12/espectro-cronica.html
Muchas gracias, le echaré un vistazo.
EliminarUn abrazo. :)
No tengo duda de que el humano se mueve por emociones. ¿Será el amor la más poderosa?
ResponderEliminarYo diría que sí, es la más poderosa.
EliminarGracias Cabrónidas.
Un abrazo. 🤗
Genial diálogo entre cabeza y corazón. De verdad que en momentos cruciales, ambos no se ponen de acuerdo. Me gustó mucho Merche. Un abrazo 🤗
ResponderEliminarMuchas gracias, Maty. Nunca se ponen de acuerdo, en realidad, pero esa es la gracia.
EliminarUn abrazo. :)
Es un diálogo que cualquiera puede reconocer en sí mismo en algún momento de su vida. Me ha gustado mucho cómo has plasmado esa eterna lucha entre cabeza, corazón y alma. El amor, al final, no siempre es lógico ni fácil, pero como bien dices, cada cicatriz deja una enseñanza. Lo importante es seguir adelante sin perder la capacidad de sentir. Un texto precioso, Merche.
ResponderEliminarAsí es, Miguel, siempre hay que seguir...
EliminarGracias por pasar.
Un abrazo. :)
Precioso, Merche.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Un abrazo enorme.
Muchas gracias, Estrella.
EliminarUn abrazo. :)
Al amor no se le puede decir que no, tiene tanta fuerza...
ResponderEliminarSAludos.
Así es...
EliminarGracias, Manuela.
Un abrazo. :)
Muy hermosa entrada Merche y ese diálogo, ¡qué bonito!, todo un gran suceso para terminar en ese poema que encumbra a todo lo escrito, abrazo bien grande Themis
ResponderEliminarMuchas gracias, Themis.
EliminarAbrazo. 🤗
Es que Lope de Vega arregla todos los problemas con esos versos, Merche. Sin ellos no habrían llegado a un acuerdo con tanta facilidad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo :-)
Ya te digo, Miguel, ya te digo. Gracias.
EliminarUn abrazo. :)
Desde luego el alma es la suma de la cabeza y el corazón. Un abrazo.
ResponderEliminarAsí es. Gracias, Federico.
EliminarUn abrazo. :)