11 julio 2022

Emoticonos y emojis: una nueva manera de comunicarse.

 


Esas caritas sonrientes que llenan nuestros mensajes y publicaciones en Internet, Whatsapp…, revolucionaron la escritura y la asemejaron a la comunicación oral. Son, en la escritura, aquellos gestos que nos saldrían de manera innata hablando, pero que por escrito no es posible, hasta que llegaron ellos: se llaman emojis y no deben confundirse con los emoticonos. Estos últimos son una secuencia de caracteres ASCII que representan una cara humana; por ejemplo, la secuencia dos puntos, raya y cierre de paréntesis :-) equivale a sonrisa o alegría. La palabra en sí, emoticono, es un neologismo, que proviene de emoción e icono, y ya desde 1857 se documentó su uso.

Los emojis surgieron en 1997 en los teléfonos móviles japoneses y rápidamente se extendieron por todo el mundo. Son pictogramas que simulan una carita y que refuerzan las emociones del hablante en una conversación escrita.

Ambas palabras han sido aceptadas por el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua y es que su uso se ha generalizado tanto que son un recurso fácil y de uso común en nuestras conversaciones escritas.

Sin duda, su utilización ha mejorado el lenguaje escrito, el coloquial obviamente, ya que han servido para dar más información sobre la intención de nuestro emisor al emitir cierta frase, porque no es lo mismo decir:

                                 eres tonto

                                      que

                                eres tonto ;-) 😀

El uso del emoticono o del emoji en el segundo enunciado indica que no se está insultando al receptor, sino que lo dice de una manera irónica, graciosa e, incluso, cariñosa. La primera frase, por otro lado, conseguiría que emisor y receptor entraran, sin duda, en una discusión. Por tanto, los emojis han evitado muchos malos entendidos y/o interpretaciones.

Y tanto nos gustan, que ya hay emojis para indicar casi cualquier cosa, objeto, emoción, profesión, lugar, acción, etc., desde una carita rodeada de nubes hasta dar un abrazo, pasando por enfados, malestar o pensamiento. Cualquier emoción se puede expresar con emojis; incluso hay juegos de títulos de películas expresados con emojis únicamente. Nos encantan y se nota.

Particularmente, considero que es una buena herramienta para aportar contenido extra al lenguaje escrito, ayudan en la comunicación y aportan más datos del hablante en cuestión. Es difícil no verlos en cualquier conversación escrita o publicación en Internet. Si no aparecen, da la sensación de que está “vacía” la publicación o es soso y poco amigable el texto.

Eso sí, en un lenguaje escrito culto, libro, artículo, etc., no es correcto su uso, pues resta formalidad, seriedad y credibilidad al texto. No es conveniente utilizarlos, a no ser que quieras dar un matiz más coloquial a tu escrito.

Los emoticonos primero y los emojis después, llegaron para quedarse, para ayudarnos y para reforzar nuestras emociones porque…, ¿quién no sonríe ante una carita que haga lo mismo?

Y a ti, ¿qué te parecen? Espero tus comentarios…


Mercedes Soriano Trapero
Foto: pixabay



2 comentarios:

  1. Siempre es un placer pasar por tu blog Merche, un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Nuria, encantada de que te pases por aquí cuando quieras :) :-*

      Eliminar