El vizconde demediado. Reseña.

 

Ficha bibliográfica

• Autor: Italo Calvino 
• Editorial: ‎ Siruela; N.º: 20 edición (14 noviembre 2019)
• Idioma: ‎ español
• Tapa blanda: 96 páginas
• Género: fantasía
• Edad recomendada: a partir de 14 años

                          Sinopsis

   "El vizconde demediado es la primera incursión de Italo Calvino en lo fabuloso. Cuenta la historia del vizconde de Terralba, quien fue partido en dos por un cañonazo de los turcos y cuyas dos mitades continuaron viviendo por separado. Símbolo de la condición humana dividida, Medardo de Terralba sale a caminar por sus tierras. A su paso, las peras que cuelgan de los árboles aparecen todas partidas por la mitad. «Cada encuentro de dos seres en el mundo es un desgarrarse», le dice la mitad mala del Vizconde a la mujer de quien se ha enamorado. Pero ¿seguro que se trata de la mitad mala?

      Esta magnífica fábula, cuajada de fantasía y sentido del humor, plantea la búsqueda del ser humano en su totalidad, quien suele estar hecho de algo más que de la suma de sus mitades. El vizconde demediado forma parte de la popular trilogía «Nuestros antepasados», junto con El caballero inexistente y El barón rampante, con los que comparte el tono de fábula fantástica y el propósito de indagación sobre el alma humana".

                           Opinión 

    Italo Calvino es un periodista y escritor italiano del siglo XX. Escritor de novela, cuentos y ensayo; cultivó el neorrealismo y se sintió muy atraído por la fantasía y las fábulas. 

       El vizconde demediado fue publicado en 1952 y ya en la nota preliminar el autor nos indica que la escribió para divertirse y entretener a los demás. Él tenía en la cabeza esa imagen que desarrolla en el libro, la de un hombre partido en dos e indica que todos somos así en cierta manera, que desarrollamos una parte nuestra y no la otra. La narró en forma de cuento y donde ambas partes fueran igual de insoportables, creando así cierta comicidad. 

      En general, es un libro diferente que se lee de forma más o menos fácil, aunque, particularmente, en algunos momentos se hace un poco pesado, flojo, redundante, absurdo y sin llegar a enganchar del todo. Sin embargo, por otro lado te apetece continuar leyendo por ver qué pasa con ese personaje dividido en dos.  

      A pesar de ese argumento tan excéntrico y de ese personaje de igual manera, el libro, como bien dice el autor en la nota preliminar, habla de la realidad de la vida, de la realidad de cada uno de nosotros que albergamos una parte "buena" y una parte "mala", desarrollando cada una según las circunstancias. 

    Este autor cultivó lo absurdo en sus obras y esta podría ser una de ellas, el vocabulario, no obstante, es sencillo, no es difícil de leer en ese aspecto. La narración es fluida, la combina con el diálogo sin que predomine una por encima de otra. Los personajes están bien desarrollados y el Vizconde, protagonista de la obra, y sus dos mitades, demuestra la realidad de la sociedad con su hipocresía y egoísmo, en su parte "mala" y con sus desmedidas galanterías en la "buena". Terminamos pensando que lo mejor es "tirar por el medio" y equilibrar ambas partes en nuestra vida.  Esa es la enseñanza que podemos extraer. 

       Aunque el autor al principio del libro indica que escribió esta obra para divertirse y, a la vez, entretener a los lectores, en mi caso no lo ha logrado, sí considero que él se divirtiera escribiéndola, pero a mí no me ha resultado cómica, más bien, como comento, absurda, rara y demasiado fantasiosa. Me gusta la fantasía, pero no de esta manera. En cuanto a su matiz de fábula, sí podría considerarse como tal por la enseñanza que puede quedarnos tras su lectura. Esta primera frase que destaco en indica lo que comento, justamente. Aparece recogida en la nota preliminar.

     "Yo creo que la diversión es una cosa seria".

        Para el autor, el humor y hacer reír es una cosa seria, es decir, no es una cosa que haya que tomarse a la ligera, sino todo lo contrario.  

       Y esta segunda frase que me llamó la atención aparece casi en la conclusión del libro y podría servir, perfectamente, como moraleja del libro o la intención del autor al escribirlo. 

    "No hay noche de luna en la que en los ánimos malvados las ideas perversas no se enreden como serpientes en su nido, y en la que en los ánimos benéficos no broten lirios de renuncia y entrega". 

       En general, un libro corto, fácil de leer, aburrido en algunos capítulos, pero diferente en otros. Si te apetece leer algo distinto, te lo recomiendo.