¡Hola!
Este año, mi participación en la revista de la Asociación Cultural Malas Tardes ha sido la siguiente: una recreación y continuación de un capítulo del Quijote, en el que aparece nombrada la población de Miguelturra, intentando mantener la estructura, vocabulario y atmósfera típica de esta ilustre obra de la literatura española. No sé si a Cervantes le hubiera gustado esta recreación, por cómo se tomó la continuación de su Quijote en el conocido como Quijote de Avellaneda, escrita por Alonso Fernández de Avellaneda y al que criticó cuando apareció su verdadera segunda parte, pero lo he hecho desde el respeto y el cariño y porque Miguelturra aparezca nombrada en ella. Espero que desde el parnaso de los escritores de renombre, me valore el guiño a su obra original. Fue un reto, a la vez que divertido, escribirlo.
Dejo a continuación fotos de la portada, del artículo maquetado en la misma y del artículo completo para aquellos que estáis lejos y no podéis adquirir la revista.
Un placer poder colaborar en la misma.
Miguelturra aparece nombrada en el capítulo 47 de la segunda parte de Don Quijote de la Mancha (El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes Saavedra); en dicho capítulo, Sancho, nombrado Gobernador de la Ínsula Barataria, recibe la visita de un labriego de esta villa para pedirle una carta de recomendación dirigida a Andrés Perlerino, ya que su hijo, estudiante de bachiller, pretendía la mano de la hija del rico labrador miguelturreño Clara Perlerina. Sancho accede a darle la carta, pero el interesado le pide dinero y el gobernador se enfada y lo expulsa de la sala, diciéndole: “tú no debes de ser de Miguel Turra, sino algún socarrón que para tentarme te ha enviado aquí el infierno”.
He recreado una posible continuación de este episodio en la que Andrés Perlerino y Don Quijote entablan una conversación por este motivo.
De cómo Don Quijote medió ante su amigo Perlerino por la mano de su hija en favor del hijo del labrador
Don Quijote, habiendo escuchado a su escudero Sancho salió al paso del labrador.
—Mi buen amigo labrador, espere, mis oídos han escuchado lo que mi labriego Sancho, ahora convertido en Gobernador de la Ínsula Barataria, le ha relatado en el caso expuesto por vuesa merced.
—Así es, el muy olvidadizo de su antigua condición me ha echado con cajas destempladas. —Respondió el labriego.
—No se preocupe vuesa merced, que yo hablaré con mi amigo Andrés Perlerino en la villa de Miguel Turra para que consienta en el casamiento de su hija, que aunque su hijo no tenga nada de perla oriental, bien pueda la perlática hija casarse con el que será próximo bachiller de su vivienda.
—Justo es señor que así sea, pues en entuertos del corazón solo hombre y mujer entran y ellos, saberse se sabe, de esos amoríos entienden.
Con saludos calurosos, se despidió el labriego del caballero y este, montando en Rocinante, inició su viaje hacia la villa de Miguel Turra, encontrándose en la misma con su amigo Andrés, nada más entrar.
—Mi buen amigo Alonso Quijano, a qué debo el honor de presentarse en mi casa y en mi villa, esta de Miguel Turra.
—No ha muy lejos de aquí me hallaba y viendo que mi buen caballo Rocinante necesitaba descanso, di con mis huesos en estos parajes.
—Pase, pase, vuesa merced y con un buen vino y unas viandas dejaremos a su montura descansar mientras nosotros conversamos.
—Buen queso y vino este que tienen por aquí, si muy buen escudero Sancho cayera por estos lugares, mal recado traerían sus mayordomos. —Respondió el caballero con la boca llena.
—Sí, Sancho, el recién nombrado Gobernador de la Ínsula Barataria, hasta aquí llegaron las buenas nuevas.
—Esto es, mi buen amigo Perlerines, y aunque de condición humilde procede, sus sesos se han ablandado en el cargo y no muy justo en sus decisiones es.
—¡Qué desfachatez me cuenta, mi buen amigo Quijano!
—Y es más todavía, que esotro día asistí a la petición de un bondadoso labriego que solo quería una misiva de recomendación para vuesa merced. Un hombre justo, leal y tan bueno como el buen pan, paisano de vuesa merced.
—Me interesa este discurso y…, ¿qué ocurrió?
—Mi buen escudero Sancho lo echó con cajas destempladas, no eran horas de negociar argumentaba y el fin del buen señor era honrado y merecedor de sus entendederas. Él pretendía que le escribiera a vuesa merced para interceder en el casamiento de su hijo, futuro bachiller, y la hija de vuesa merced, su más estimada perla de oriente, como él bien la llamó.
—Entiendo, entiendo, conozco a ese paisano que nombra y sí, en buena estima le tengo, pues dos tierras tenemos linderas… Y así sea, si vuesa merced lo dice, que en gustose hombre otorgaré la mano de mi hija. No soy yo de bajo seso, como su mal nombrado escudero Sancho, los dos de padres labriegos somos y, como tal, a buen recaudo pondré a mi hija Clara.
—Muy halagados se van mis oídos, pues. Si por estos lugares de la Mancha me encuentro el día de los desposorios, tenga por seguro vuesa merced que vendré a dar buena cuenta de los mismos, al injusto gobernador y a mi propia persona.
—Invitado queda. Organizaré un casamiento digno de una princesa y en boca de todos correrá por todos los rincones de aquesta nuestra tierra.
—Me despido entonces, mi buen amigo, a desfacer entuertos continúo. Agradecido por sus viandas quedo y en espera de esa boda que todos recuerden. Mis respetos a su señora y a la hija de vuesa merced y hasta más ver, amigo Perlerino.
Mercedes Soriano Trapero
Enhorabuena, una muy buena idea. Me gusto vuestra colaboración.
ResponderEliminarAbrazos
Hola Campirela, muchas gracias. Un abrazo. :)
EliminarMerche! Este 2023 sí que es el año de las sorpresas muy gratas contigo. Mi admiración, mi respeto. Te ha salido increíble, se nota que te has divertido. Te felicito de todo corazón por esta participación, me ha dado gusto conocer esta revista, original hasta en su nombre. Yo, no hubiese sido capaz de hacer esto, que tiene su grado de dificultad.
ResponderEliminarUn abrazo triple Merche!!! 🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹
Mil gracias Maty, agradezco enormemente tus palabras. Un fuerte abrazo. :)
EliminarEs increíble lo que haces con tus letras,en este caso viajar con Don Quijote aplausos Merche
ResponderEliminarMuchas gracias. Un abrazo. :)
EliminarBueno, bueno. Merche, lo primero felicidades. Qué maravilla de capítulo, el lenguaje, las expresiones, el hilo conductor de los personajes. Creo que Cervantes daría muy gustoso su aprobación. Enhorabuena, por el texto y por tu participación en la revista, que también te agradezco porque no la conocía. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola Mayte, muchísimas gracias, no sé yo, mira las críticas que sufrió Avellaneda por su parte, jeje. De verdad, mil gracias, es muy importante tu opinión para mí.
EliminarUn abrazo. :)
Andaba yo con el susodicho, Don Alonso Quijano, en esas lides que nos convocan para la lectura y escritura de caballeros andantes, cuando me comentó las malas formas que tuvo su escudero, Don Sancho, con un paisano de Miguel Turra. Le noté enfadado, hasta diría que contrariado por el encontronazo.
ResponderEliminarTras varios improperios mal sonantes, surgidos de la frustración, me acabó contando que todo tuvo su final sin derramamiento de vino y aceite, más bien con ellos sobre la mesa para saborear un buen queso de aquella villa. Pues, según me contó, medió Doña Merche Soriano para, con buen hilo y aguja, zurcir aquello que la boca no supo. "No hay pluma y tintero que no reescriba una historia a medias contada."
Quedé convencido de las virtudes que podía disfrutar en tales tierras y allí me dirijo; el camino es largo y polvoriento, pero si es por conocer la zona, un esfuerzo se hace. Te haré saber si aquellas "Malastardes", son para tal nombre.
Hola, Julián, ¡genial! Me ha encantado, ni Sancho, ni Don Quijote, no Cervantes, no yo misma lo hubiera expresado mejor. Muchas gracias por tus bellas palabras.
EliminarUn abrazo. 😊
Muy bueno Merche, un gusto leerlo, abrazo fuerte
ResponderEliminarMuchas gracias. Un fuerte abrazo. :)
EliminarHola Merche, ya hice meses atrás un pequeño homenaje al quijote con el que me divertí mucho. A ti te ha quedado muy bien el juego de palabras y Perlerino estará contento. Me quedo con la palabra "entuerto" que solía usar mi madre. Te aplaudo. Un abrazo
ResponderEliminarHola Nuria, sí, es una palabra muy peculiar y con mucha sonoridad. Gracias por pasarte. Un abrazo. :)
EliminarQué grande, Merche.
ResponderEliminarIntentar recrear un texto del genial Cervantes y, además, de El Quijote es toda una osadía. Pero has superado la prueba con creces. Seguro que te habrán felicitado por tu participación.
Enhorabuena.
Un fuerte abrazo :-)
Hola, Miguel: sí que fue una osadía, sí, y todo un reto, espero que Cervantes no se haya indignado mucho.
EliminarGracias por tus palabras.
Un abrazo. :)