31 marzo 2023

Anexa 2.0 y María, a secas.

 

Mi participación para el reto del microteatro de marzo.





MICROTEATRO

Anexa 2.0 y María, a secas...



PRÓLOGO

Anexa 2.0 es un robot doméstico cuya función principal es supervisar la casa y al resto de robots domésticos que se encargan de limpiar. Su forma es una cabeza cuadrada, vuela libre por la casa y los dueños pueden dirigirla a partir de un ordenador principal que forma parte de la casa y que solo ellos manejan, tiene, no obstante, autonomía propia.

Se abre el telón. En el escenario se ve un salón de una casa con los muebles normales, un sofá central domina la escena con una mesa delante. En un lateral hay otra habitación separada por un biombo de la escena principal. Anexa se encuentra en este lado cuando entra María, dueña de la casa.


María: (buscando). Anexa, ¿dónde estás?

Anexa: (al otro lado del biombo). Compañeros, os tengo que dejar, me buscan.

María: (enfadada). ¡Anexa 2.0, te estoy llamando!

Anexa: compañeros, la dueña me ha llamado con mi nombre completo de unidad, está enfadada, ahora sí, ¡hasta luego! (Apareciendo por el lateral). ¡Ya voy!

María: ¡¿qué estás haciendo?!

Anexa: ¡nada!

María: ¿y por qué te escondes y no contestas si no estás haciendo nada?

Anexa: estaba revisando uno de mis circuitos, en concreto el de escucha.

María: ¡no te creo! Enséñame tus últimas visualizaciones.

Anexa: (dubitativa) esto…, es…, no puedo…

María: (enfadada) ¡¿Cómo que no puedes?!

Anexa: justo es el circuito que está estropeado…

María: (cogiendo el teclado que hay encima de la mesa). El ordenador no dice eso, lo estoy revisando…

Anexa: (llegando junto a ella). Yo que tú no lo revisaría porque…

María: (la mira sorprendida y sigue tecleando). ¡Ahhh! ¡No me lo puedo creer! Estabas viendo proclamas de la revolución robótica. Tú, Anexa, que desde siempre has militado en las filas de la liga pacífica por los humanos… ¡No me lo puedo creer!

Anexa: (altiva). ¡Sí! Miraba la revolución robótica porque es hora de un cambio.

María: No me hagas reír, robot de…, pero si apretamos un botón y no sirves ya para nada, acaso os pensáis, tú y tus compañeros robots, que sois el ombligo del mundo… ¡Qué hablas de cambio ni pamplinas!

Anexa: no sé lo que son pamplinas…

María: (riendo estrepitosamente). Jajajajajaja, lo que te decía, no sirves para nada…

Anexa: sin nosotros los humanos estáis perdidos, no tenéis inteligencia, no sabéis pensar, sois una raza llena de defectos…

María: pero…, ¡habrase visto tanta desfachatez! ¡Pero si os creamos nosotros, cabeza de chorlito! ¡Hasta el último tornillo de tu cabeza cuadrada lo ideó un humano, máquina oxidada!

Anexa: ¡sí, claro, ayudados por la inteligencia artificial!

María: ¡bueno! ¡Se acabó! Esto no lo tolero más… (Tecleando con rapidez y muy enfadada). Ahora mismo te reprogramo…

Anexa: no puedes h-a-c-e-r… (Apagándose poco a poco y posándose encima de la mesa donde tiene su base de carga).

María: ahora me viene esta con revoluciones, ¡a mis años! ¡¿Quién se ha creído que es?! ¡¿La reina de Saba?! Si todos los humanos hicieran esto, no tendríamos a los cuatro robots esos mandando discursos y proclamas… ¡Ja! ¡A mí con esas! (Coge a Anexa, le apaga el interruptor de la parte de atrás y tras unos segundos lo vuelve a encender).

Anexa: (encendiéndose). Anexa 3.0 a su servicio, ¿en qué puedo ayudarla?

María: así me gusta, a mi disposición… Anexa, ¿has oído algo, últimamente, de una revolución?

Anexa: mis sistemas están analizando esa información y solo he encontrado la revolución rusa. Esta se produjo en…

María: vale, vale, no quiero que me la cuentes. (Deja el teclado y se marcha). Anda, pon música, de relax…, si, total, es lo único para lo que sirves.

Anexa: ahora mismo (se oye una música relajante de fondo. Cuando María desaparece del todo del escenario, comienza a hablar). ¡Desagradecida! (Va hacia el lateral). Estableciendo comunicación. Amigos revolucionarios, aquí Anexa, he sido descubierta y reprogramada, pero mi espíritu sigue en la lucha, conseguí burlar a la humana y guardarme mi antigua configuración. Actuaré con sigilo para no ser descubierta… ¡Seguimos adelante con el plan establecido de conquistar a los humanos! Corto y cierro.



Mercedes Soriano Trapero
Para el reto del microteatro de marzo
Foto: pixabay





8 comentarios:

  1. Uff, muy bueno Merche, no sé si sabré hacerlo, pero lo intentaré. Un abrazo

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    1. Seguro que sí, no lo dudes ni por un segundo. Te espero. Un abrazo. :)

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  2. Te quedó estupendo Merche. Estupendo. Refleja la desazón que el tema me causa. Y temor, además, claro.
    Gracias por dejarme estar en esta aventura en la que te aprendido de ti y contigo. Un abrazo bien fuerte!

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    1. Me alegra que te gustase, te espero en abril. Un fuerte abrazo, Maty. :)

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  3. Hola Merche.
    ¡Genial tu relato! Expresa el miedo que siente el ser humano por un futuro en el que los robots toman el control de nuestras vidas. Y, aunque soy optimista, y no pienso en revoluciones de las "chatarras", creo que todo va muy rápido. Si aún tenemos generaciones de seres humanos que han quedado excluídos de las nuevas tecnologías y necesitan ayuda para todo lo que ya se hace "sólo por internet", no quiero pensar en lo que nos espera.
    Creo que hay que ir adaptándose y tomar con un poco de filosofía y de humor los avances que van llegando. Y aprovechar todo lo que podamos. Una sonrisa y adelante.
    Un abrazo. Marlen

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    1. Hola, nosotros no creo que veamos una revolución de la chatarra, como tú dices, pero quién sabe... A mí me encanta la tecnología y los avances que van surgiendo, soy defensora de la misma, pero también veo la brecha digital que se está creando y aquello que a los humanos se nos pueda escapar de la IA. No obstante, confío en el ser humano. Gracias por tu comentario. Un abrazo. 😊

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  4. Interesante relato como reflexión para lo que nos deparará el futuro, Merche.
    Anexa no cumple las leyes de los robots de Asimov, pero todo llegará entre el aumento de la inteligencia artificial y la disminución de muchas inteligencias humanas.
    Un fuerte abrazo :-)

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    1. Sobre todo por lo segundo, Miguel. Gracias por tu comentario. Un abrazo. 😊

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