Mi participación para el reto del microteatro (septiembre).
La escena se desarrolla en una agencia de viajes, la dueña de la misma está hablando por teléfono cuando pasa un señor de mediana edad. Combina la conversación con él y con el teléfono, el cliente no sabe cuándo le habla a él y cuándo no.
Dueña: ¡buenas tardes, señor! Pase, pase, siéntese. (Le dice señalando la silla delante de su mesa y sin quitarse el teléfono de la oreja).
Ramiro: hola, no quería molestar, como está usted con el teléfono...
Dueña: no se preocupe, estoy intentando conectar… (Dirigiéndose al teléfono). Sí, sería un viaje para once personas, cinco habitaciones dobles y una individual… (Dirigiéndose a Ramiro). Pues dígame qué desea.
Ramiro: (dubitativo), pues, quería a ver si hay algún destino de playa…
Dueña: sí, eso es, con media pensión… (A Ramiro). Sí, playa con pensión completa.
Ramiro: sí, pero mejor con media pensión.
Dueña: no, con media pensión no, con pensión completa.
Ramiro: ¿me pregunta a mí?
Dueña: sí, le digo a usted, sale más económico con pensión completa, por eso se lo recomiendo.
Ramiro: ¡ah! Bueno, a ver por cuánto saldría.
Dueña: de acuerdo, ¿cómo se llama?
Ramiro: Ramiro… (se detiene porque la dueña le dice con la mano que pare, no se refería a él).
Dueña: señor Gutiérrez, sí, ¿podría atenderme de una vez?
Ramiro se remueve en la silla incómodo.
Dueña: sí, entonces con media pensión, sí, sale más económico…
Ramiro: pues no me ha dicho usted hace un momento que mejor con pensión completa porque… (Se vuelve a detener porque la dueña le dice con la mano que pare).
Dueña: de acuerdo, espero… (A Ramiro), muy bien, señor Ramiro, querría ir a la playa con pensión completa, ¿algún lugar en concreto?
Ramiro: pues ya no sé si quiero pensión completa o media, señorita.
Dueña: le recomiendo la completa…(Al teléfono), no, no, media pensión, media pensión…
Ramiro: (algo enfadado), es que me está usted liando, señorita.
Dueña: no se preocupe, no se preocupe, ahora mismo le voy mirando precios, verá como le sale más económico… (Se pone a mirar por el ordenador, pero no suelta el teléfono).
Ramiro: quizá mejor vengo en otro momento si eso, la veo muy ocupada.
Dueña: no se preocupe, no se preocupe, lo comprendo, es normal, mucha gente quiere salir de viaje ahora… No se preocupe, no se preocupe…
Ramiro no dice nada, no sabe si le está hablando a él o al teléfono.
Dueña: perfecto, mire, pensión completa en Benidorm una semana 355 €.
Ramiro: vaya, pues sí que sale genial de precio, pero conozco Benidorm, a ver si va a ser allí arriba en la montaña lindando con Terra Mítica en un hotel de cinco plantas sin ascensor…
Dueña: sí, sí, en la montaña, cuanto más alejado mejor, sí, sí, más barato…
Ramiro: ¡no le digo! No, no, ese no me interesa.
Dueña: no, no, no es en la montaña, es a pie de playa, una oferta de un localizador de la Comunidad Valenciana. No la puede dejar escapar.
Ramiro: (enfadado), pero no ha dicho que era en la montaña…
Dueña: sí, sí, en la montaña…
Ramiro: pues eso he entendido… Mejor otro sitio que no sea Benidorm…
Dueña: pierde una gran ocasión… Sí, sí, con media pensión…
Ramiro: (enfadado), pues no quedamos que era con pensión completa, señorita, no la entiendo.
Dueña: aquí tengo en Altea, pensión completa, una semana a pie de playa, 975€
Ramiro: ¡¡uuufffffff!! ¿De cinco estrellas el hotel, como poco?
Dueña: no, no, en la montaña.
Ramiro: ¡que no, que no quiero en la montaña!
Dueña: sí, media pensión.
Ramiro: a ese precio, ni media ni entera, ¡qué leches! ¡A bocadillos!
Dueña: 3.015 €, cuatro noches, ¿verdad?
Ramiro: ¿a ese precio cuatro noches? Busque por ahí algún pueblo poco conocido, eso sale muy caro.
Dueña: sí, sí, con pensión completa…, estoy buscando, estoy buscando… ¿Habitación individual?
Ramiro: no, mi señora y yo, habitación doble.
Dueña: no, no puede ser una doble, tiene que ser individual.
Ramiro: ¿y cómo nos vamos a meter mi señora y yo en una cama pequeña? Mire usted que ya no tenemos edad…
Dueña: no, no, individual, aunque salga más caro.
Ramiro: ¿y encima más caro? No, señorita, algo más económico.
Dueña: se dispara de precio si no es en la montaña…
Ramiro: que no, que no quiero en la montaña de Benidorm, que no… Dele a ese trasto, dele, busque, busque…
Dueña: comprendo, comprendo… (A Ramiro), entonces me había dicho que dos habitaciones individuales.
Ramiro: ¿yo? No, no, una sola.
Dueña: de acuerdo… Aquí tengo, en Cartagena, a media hora de la playa andando, una semana, una habitación individual con pensión completa, por 450 €, sale muy bien para la época en la que estamos…
Ramiro: que no, que no, habitación individual no y media pensión, que no me convence usted con lo de la pensión completa… Y, por dios, algo más cerca de la playa, que no me veo cargando con las sillas una hora.
Dueña: no, es media…
Ramiro: ya, ya, media para allá, media para acá…
Dueña: no, tiene que ser media, a la fuerza.
Ramiro: señorita, que sé sumar, que todavía no se me ha olvidado…
Dueña: ¿con baño en la habitación?
Ramiro: ¡por supuesto! Que estamos en el siglo XXI.
Dueña: no puede ser entonces.
Ramiro: ¡no! ¿Es que todavía hay hoteles que no tengan baño en la habitación?
Dueña: sí, claro.
Ramiro: ¡vaya! ¿Sale muy caro con baño?
Dueña: sí, claro.
Ramiro se remueve en la silla, está enfadado y no le gustan nada las condiciones que le ofrecen.
Dueña: ¡oh! Mire, acabo de encontrar un chollo con media pensión…
Ramiro: no me lo cuente, no me lo cuente, me lo he pensado mejor y me voy a ir a alquilar una caravana. ¡Adiós, buenas tardes!
ajajajjaaaj, una locura total. No creas que esa situación que nos has descrito se da más de lo que debería .
ResponderEliminarMuy bueno el diálogo un poco estresante para Ramiro ajajá.
Un besote, feliz sábado.
Hola Campi, sí, en las agencias a veces suceden esas locuras. Gracias por pasarte.
EliminarUn abrazo. :)
Jajaja! Estas situaciones hacen gracia pero molestan mucho cuando te pasa.
ResponderEliminarMuy imaginativo relato, Merche.
Besos.
Hola Carmen, sí, por eso el pobre Ramiro se marchó con viento fresco.
EliminarGracias por pasarte.
Un abrazo. :)
Jajajaja...qué bueno, Merche. Un agencia de viajes de lo más esperpéntica. Menos mal que no le ha ofrecido la opción de alojamiento y desayuno, jajaja. Un fuerte abrazo!
ResponderEliminarHola, Mayte: sí, hubiese sido ya el lío total. Gracias por pasarte.
EliminarUn abrazo. :)
Fino sentido del humor a partir de la confusión y conversaciones entrecruzadas. Muy divertido, el lector siente estrés sintiéndose cerca de Ramiro, el pobre. Abrazo.
ResponderEliminarHola, Joselu, veo que también has descubierto mi blog, jeje, gracias por pasarte. Sí, el pobre Ramiro no lo pasa muy bien, no. Gracias por tus palabras.
EliminarUn abrazo. :)
Yo soy de Cartagena por lo comprendo la situación. Antes de internet, eso ocurría frecuentemente cuando llegaba la época de vacaciones. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias por pasarte, Federico.
EliminarUn abrazo. :)
La multitarea de atender el teléfono y a otra persona es algo que me he encontrado en varias ocasiones, aunque sin llegar al extremo que narras de forma tan entretenida. Es un placer leerte.
ResponderEliminarSaludos!
Gracias, Marcos, me alegra que te haya gustado.
EliminarUn abrazo. :)
La 'agencia de los líos' Muy simpático el texto. Enhorabuena!
ResponderEliminarlady_p
Sí, de los grandes líos diría yo. Gracias por pasarte.
EliminarUn abrazo. :)
Jajajaja, muy buena escena Merche, eres un crack en esto del Microteatro. Menudo lío. Me ha encantado. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Nuria. Me alegra que te gustase.
EliminarUn abrazo. :)
;))))
ResponderEliminarHe quedado mareado, qué bueno.
Saludos.
Jejeje, como el pobre Ramiro... Gracias por pasarte, Alfred.
EliminarUn abrazo. :)
¡Qué locura!, mucho más práctica la solución, estuvo bueno, abrazo Merche
ResponderEliminarPues sí, el pobre estaba mareado ya. Graciassss.
EliminarUn abrazo. :)
Jajajaja...muy divertido. Me ha recordado a un gag que les escuché a Gomaespuma, hace muchos años, sobre un señor que había pedido un taxi pero, como no le llegaba, quería anularlo y no había manera. Genial, mis felicitaciones.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegra que te haya hecho reír. Gracias por pasarte.
EliminarUn abrazo. :)
Jajajajaja qué rollo. A cuántos les pasan estas cosas, a cuántas! Qué buenas ideas Merche, hasta nervios me azotaron.
ResponderEliminarBien por tus retos!
Muchos abrazos 🌹
Jajajajaja, me alegra que te gustase, Maty. Mil gracias.
EliminarUn abrazo. :)
Hola Merche, me hiciste reír de imaginar todo ese embrollo ¡Pobre Ramiro! Y es que en verdad algunas personas que están en el ramo de los servicios no hacen bien su trabajo que es, de entrada, ponerle toda la atención a su cliente. Muy buen microteatro con una situación jocosa. Me gustó mucho.
ResponderEliminarHola Ana, me alegra que te divirtiera, de eso se trata. Gracias por pasarte.
EliminarUn abrazo. :)
Vaya estrés que tiene la de la agencia, Merche. Todos los días así es inaguantable y más perdiendo a clientes asustados.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo :-)
Jajajaja, gracias, Miguel.
EliminarUn abrazo. :)